Enamórate de mi lado oscuro,
de mi lado malvado,
del lado que nadie le gusta,
porque del otro lado
cualquiera se enamora.
Enamórate de mis malos momentos,
de mis inseguridades y mis defectos,
de mis caprichos y mis tonterías,
porque de mi lado brillante y seductor
cualquiera se enamora.
Enamórate de mi inmadurez,
de mi tozudez y mi impaciencia,
de mi parte salvaje e imprevisible,
porque de mi lado pasional e irresistible,
cualquiera se enamora.
Enamórate de mi locura,
porque de mi lado sereno,
ya te has enamorado.
Rosa Vidal, 2014.